Tim Atkin Argentina Special Report 2019: Análisis de Vinos

Desde su primer reporte en 2012 hasta la edición 2019, Tim Atkin MW ha visto una gran evolución del vino argentino. Así lo destaca en este último reporte, en el que se lamenta también de las recurrentes crisis que dificultan el desarrollo de la industria vitivinícola en nuestro país. Atkin reconoce que los vinos argentinos han afianzado su identidad: los consultores internacionales cada vez tienen menos peso y los enólogos locales –que se mantienen actualizados y en contacto con lo que ocurre en el mundo– apuestan por vinos que expresan cada vez más su terroir específico. Estos son los diez puntos con los que Atkin resume los datos más relevantes de la producción de vinos en nuestro país en 2019:

Argentina es el mayor productor de vinos en Sudamérica y el quinto a nivel mundial.
Se están expandiendo las fronteras de producción: desde Jujuy hasta Chubut hay una inmensa variedad de posibilidades.
Los mejores vinos argentinos se definen actualmente por su terroir, impulsados por la experimentación intuitiva pero también por la evidencia científica que aporta el conocimiento de los suelos.
El peso del año de cosecha resulta cada vez más relevante y aporta variedad.
Argentina puede producir cualquier tipo de uva debido a su variedad de climas: no todo es Malbec.
El nivel de los blancos argentinos viene mejorando año a año y compite con los mejores de Chile.
La frescura y el balance han transformado el estilo de los mejores tintos.
Hay un redescubrimiento de las raíces hispanas con el auge de la variedad Criolla Chica.
Frente a la caída del consumo interno, Argentina debe focalizarse en el sector premium.
Los problemas económicos y la incertidumbre política está dañando la industria del vino y al país en general.

Más allá de los problemas actuales, Atkin se entusiasma con la creatividad y la pujanza de los vinos argentinos. El talento de las nuevas generaciones de enólogos, la experiencia de los que vienen trabajando hace tiempo, junto con el potencial de viñedos como los de Gualtallary, Uspallata, San Pablo, El Challao, Chubut y la Quebrada de San Lucas, auguran vinos de excelencia para los próximos años. Los datos son promisorios: el 67,46% de los vinos obtuvo en este informe un puntaje por arriba de los 90 puntos. En la edición anterior el porcentaje había sido de 59,88%. Se trata de un notable salto de calidad.

Estas son algunas de las etiquetas de Rutini Wines que se destacan en el informe: