Vendimia 2024

La temporada de cosecha del 2024 ha sido una experiencia única para nuestra bodega en la que se destacó la influencia del clima, los rendimientos y la pericia de todo el equipo. Mariano Di Paola, Director Enológico apunta “Fue una grata cosecha porque empezó diferente a lo habitual, tuvimos meses muy cálidos que demoraron la maduración de las uvas pero finalmente, obtuvimos una gran madurez de los azúcares y sobre todo de los aromas.”    

Precisamente se trató de una temporada con un clima poco usual: se caracterizó por una primavera fría con muchos episodios de viento zonda especialmente durante el cuaje, para luego dar paso a una época muy calurosa entre finales de enero y principios de febrero, en pleno envero. Esto significó una ralentización de la fotosíntesis,  dado que la temperatura óptima para la planta es entre los 18°C y los 25°C. Como consecuencia de este período de temperaturas mínimas y máximas elevadas, la vid entra en una suerte de letargo produciendo azúcar en breves lapsos de tiempo.

Una vez transcurrida esa etapa, hubo algunas lluvias con descenso de temperatura. Esto se tradujo en una aceleración de la maduración, lo que implicó un gran trabajo de coordinación entre las áreas logrando iniciar la cosecha en el punto óptimo de madurez. 

La marcada diferenciación de expresión entre zonas, dieron vinos más aromáticos de boca fluida en zonas como El Cepillo o Altamira, mientras que en Gualtallary, los vinos desplegaron todo su potencial cualitativo sobre la fruta negra, la boca madura y taninos estructurantes pero elegantes.

“Podemos decir que los vinos de este año van a ser muy interesantes: equilibrados, con marcada presencia de fruta fresca y taninos amables. Resalta la intensidad frutal de los Cabernet Sauvignon y los Malbec junto a los Cabernet Franc y los Merlot; mientras que los blancos se destacan por su buena tipicidad y nitidez aromática.”; cierra Mariano.